martes, 28 de octubre de 2014

Dime qué sueñas y te diré quién eres


El tema de los sueños resulta fascinante para algunos de nosotros, muchas veces queremos descubrir sus significados cuando llegan a nosotros en esas noches tranquilas (o a veces inquietantes). “Anoche tuve un sueño… No lo cuentes si es feo” son algunas de las expresiones que se escuchan con frecuencia. Pero no es de ese sueño de lo que hoy quiero hablarte, lo que para Freud serían manifestaciones del inconsciente. Es de ese “sueño” que albergas en tu corazón (resulta paradójica esta expresión: ¿cómo puede atribuirse esta actividad mental al corazón?), de eso que anhelas con tanto amor ver en tu realidad para cumplir tu misión y ser feliz. Me imagino que sabes a lo que me refiero.

Todos tenemos un sueño especial (o muchos quizá) y a veces no logramos materializarlos y se quedan para siempre en eso, en algo efímero, en algo que quisimos y nunca fue. ¿Te has preguntado últimamente porque tus sueños no se hacen realidad? Me gustaría que juntos nos embarcáramos en una aventura divertida: crear y hacer realidad nuestros sueños. Poco a poco compartiré contigo algunas pautas para desarrollar nuestro poder personal de hacer realidad nuestros sueños. ¿Me acompañas?

martes, 14 de octubre de 2014

Trilogía de un maestro


Hace algunos años me tropecé con la historia de vida de un maestro: Frank McCourt. Abajo les dejo algunas impresiones de sus obras. Recomendado para los amantes del arte de enseñar.

 
TRILOGÍA DE UN MAESTRO

¿Cómo llegué a leer los libros de la trilogía de Frank McCourt? De una manera curiosa: supe del autor por su segundo libro, El Profesor; lecturas personales de algunos fragmentos y la lectura en voz alta de quien ya lo conocía hace tiempo. Me llamó mucho la atención esa forma tan espontánea de escribir, de decir las cosas y de llamarlas por su nombre con tal naturalidad, en la que se mezcla el humor con lo serio y reflexivo que puede llegar a ser la vida de un maestro. Quise saber más del autor y me comentaron que su primera obra, Las Cenizas de Ángela, fue la ganadora del premio Pulitzer y, por casualidad, (aunque no creo en las casualidades) ese libro me lo habían regalado hacía unos meses atrás. Así que, motivada por lo poco que conocía del autor y por su estilo, decidí iniciar la lectura de esa obra.

El primer libro de la trilogía lleva por título Las Cenizas de Ángela, en él McCourt narra la historia de su vida desde los tres años de vida, cuando emigró, junto con sus padres y hermanos,  de Estados Unidos a Limerik, Irlanda, tierra natal de sus progenitores, hasta los diecinueve años cuando regresa a América en busca de un mejor futuro. Es una historia marcada por la miseria, el hambre y las necesidades. Cuando lees esas páginas no te imaginas que pueda existir tanto dolor, tanta tristeza en la vida de alguien; pero al mismo tiempo percibes el deseo y las ganas del protagonista de salir adelante y ayudar a su familia. Se enfrenta a todo tipo de adversidades, de enfermedades, a la muerte de seres queridos y hasta al abandono de su padre, pero, aún así, a pesar de todo, la esperanza nunca muere en él.

Después de leer el primer libro, empecé la búsqueda del segundo, pues era mi deseo conocer cómo seguía la vida de Frank, si finalmente había tenido suerte, pero al igual que a él la suerte no me acompañó y no lo encontré, así que decidí leer el tercer libro de la trilogía, aquel que me motivó: El Profesor. En este libro McCourt narra su experiencia como docente en los Estados Unidos durante más de tres décadas. Cuenta con la misma naturalidad, crudeza y realidad las dificultades a las que tuvo que enfrentarse en sus inicios como maestro, las estrategias que tuvo que implementar para acompañar y orientar mejor a sus alumnos. Mientras te sumerges en las páginas del libro, sientes que otro maestro cuenta tu historia; las ocurrencias de los alumnos y los problemas que se dan al interior de la clase, en un salón, trascienden el tiempo y el espacio y hasta llegas a pensar: nada ha cambiado (en la escuela), los estudiantes son los mismos aquí y allá, ahora y en todos los tiempos.

Finalmente, tuve la oportunidad de encontrar el segundo libro de la trilogía: Ajá, sí, lo es! (aún no comprendo el porqué de este título, debió llamarse como el primero, en fin). Aquí continúa la vida de Frank una vez que llega a Nueva York. Llega a un país que ya no reconoce, en el que todo ha cambiado y donde no tiene a nadie. En este libro, el autor nos narra lo que vivió antes de convertirse en profesor; los trabajos que tuvo que realizar para ganarse la vida y sobrevivir, su paso por el ejército, por la universidad, cómo conoció a la mujer que se convirtió en su esposa, el reencuentro con su familia: con sus padres y hermanos y la muerte de su madre Ángela (he aquí el porqué pienso que el mejor nombre para este libro era las Cenizas de Ángela).

Como se pueden dar cuenta, son tres libros que te cuentan la vida de una persona, pero no de cualquier persona, si no de un maestro como tú y como yo. Frank McCourt llegó a ser maestro quizá porque no tuvo otra opción en la vida, pero poco a poco se enamora de su profesión y logra desarrollar habilidades y destrezas que le permiten realizar mejor su trabajo; de llegar y no saber qué hacer con un grupo de muchachos a quienes poco o nada les impresiona y parece no importarles nada, hasta buscar los recursos, los medios y las estrategias para lograr que aprendan y así aprovechen las oportunidades que la vida les da.